Por Claudia Castro Tirina
Desde el pueblo awajún de Perú, se busca generar conciencia con la campaña «Sin Amazonía no hay vida», la cual pretende visibilizar la importancia de preservar los bosques amazónicos, un ecosistema que aporta a la regulación del clima, la conservación de la biodiversidad, la reducción de los gases de efecto invernadero, a la medicina, el turismo y la producción de alimentos sanos.

Esta campaña además intenta dar a conocer los daños y amenazas que sufre la amazonía por actividades como la agricultura, la minería, tala ilegal, el narcotráfico, la explotación de hidrocarburos, la construcción de infraestructura, entre otras actividades que son promovidas por normas como la modificación de la ley forestal.
Cabe recordar que el Congreso de la República de Perú ha impulsado la Ley 31973, conocida como la “Ley Antiforestal”, la cual pone en peligro los bosques, principalmente amazónicos, la biodiversidad existente en ellos, la seguridad de los pueblos indígenas y sus medios de vida.
Desde el Gobierno Territorial Autónomo Awajún (GTAA) y la Organización de Desarrollo de las Comunidades Fronterizas del Cenepa (ODECOFROC), con el apoyo de CooperAcción, han lanzado la campaña “Sin Amazonía no hay vida”, con el claro objetivo de sensibilizar a la sociedad sobre la urgencia de proteger este ecosistema tan importante para sostener la vida en el planeta, el cual está siendo amenazado.
La Amazonía posee el 40% de la selva tropical del planeta y el 25% de su biodiversidad, siendo además, el hogar de 40 mil especies de plantas, 1300 variedades de aves, 3000 de peces, más de 1000 de reptiles y más de 400 especies de mamíferos.
En este contexto, el bosque amazónico es clave en el ciclo del agua: los árboles generan hasta el 50% de las lluvias en la cuenca amazónica. Un solo árbol de shihuahuaco, puede soltar hasta 3000 litros de agua al día a la atmósfera en forma de vapor. El bosque amazónico también cumple un rol determinante en la regulación del clima global, y almacena 10 mil millones de toneladas de carbono, equivalentes a 15 años de todas las emisiones globales de gases de efecto invernadero, lo cual hoy en día está en riesgo.
Otro de los actores que están en riesgo son los defensores y defensoras de este bioma y de la existencia de los pueblos indígenas, avalado con la nueva aprobación de la ley.
Los pueblos amazónicos Awajún vienen trabajando en sus propias alternativas desde sus conocimientos ancestrales y su cultura. La campaña busca difundir la visión del Tajiimat Pujut (buen vivir) que tiene el pueblo Awajún, así como su propuesta de autogobierno y las actividades y alternativas productivas que conviven en armonía con el bosque amazónico: como la cerámica Awajún, la piscicultura y la agricultura con prácticas sostenibles.
Esta campaña que comenzó el 15 de abril, también tiene su soporte con el documental, “Entre el verde y el oro”, dirigido por Roberto Pajares y realizado por el equipo del Gobierno Territorial Autónomo Awajún (GTAA), el cual aborda la extracción ilegal de oro en la provincia de Condorcanqui, región Amazonas, y busca revelar los impactos de esta actividad, tales como la contaminación de ríos y suelos, así como sus problemas sociales que incluyen la división y desplazamiento de las comunidades indígenas awajún.
El documental fue proyectado el pasado 5 de junio y Juan Reátegui del gobierno territorial autónomo Awajún indico “cuando todo se compra, la gente no tiene dinero para eso, entonces un empresario ilegal se acerca y dice, «vamos a explotar porque hay oro, tú vas a tener el 20 o 30%», de la nada le cae el dinero. Es muy fácil inclinarse por ahí y es muy fácil dejarse llevar por esas propuestas que finalmente acaban sus propios recursos”, cerró, al referirse sobre el peligro que implica la injerencia de empresas extractivas en el territorio.
