Por Noelia Carrazana y Claudia Castro T.
Las autoridades indígenas de Guatemala han llamado desde el 29 de julio a un Paro Nacional Plurinacional, en rechazo a la aprobación en el Congreso del presupuesto 2021, que incluyó recortes en educación, salud y justicia. También se manifiestan en contra de presuntos delitos de corrupción y denuncian la mala gestión del Gobierno de Alejandro Giammattei ante la pandemia de Covid-19. La palabra de la autoridad indígena Alida Arana Vicente, abogada y representante del pueblo Maya Poqoman.
Guatemala – “Ver a las abuelas de 75 a 80 años que nos acompañan y son las primeras en llegar y las últimas en irse, y cuando llega la fuerza policial y los antimotines nos dicen vamos a hablar, y ellas responden ‘no tenemos miedo, si nos podemos morir del COVID mañana pues hagámosle huevos, como se dice, pero aquí nos quedamos’, ver esa fuerza, esa energía, esa magia colectiva de las mujeres es el resultado de esas palabras, esa fuerza no es mía, es de esa fuerza colectiva que acuerpa, (…) hay hombres también, lo pasa que a veces los hombres son menos expresivos, pasa que las mujeres juntas somos más fuertes, y está ese lazo fuerte y decimos: ‘nos quieren atacar ¡no!, nos quieren humillar ¡no! nos quieren callar ¡no!, calladas hace 50 años, aurita ¡no!’”, cuenta Alina Vicente, mujer que porta su bastón de autoridad indígena, que en esta movilización son quienes llaman a unirse al paro.
Luego de haber cesado algunos días, esta semana las autoridades indígenas volvieron a movilizar y cortar carreteras obteniendo como respuesta más violencia por parte del estado a través de las fuerzas policiales.
Esta movilización nacional tiene como objetivo principal exigir la renuncia del presidente Giammattei y de la fiscal general Consuelo Porras, denunciada por el recientemente destituido fiscal Juan Francisco Sandoval, quien en su exilio advirtió por el fracaso en la compra de las vacunas Sputnik V. En la investigación que Sandoval llevaba adelante consta información sobre conversaciones entre el presidente y ciudadanos rusos.
El paro fue retomado el jueves 19 de agosto, pero en la jornada del viernes el gobierno envió a miembros de la policía a reprimir en algunas rutas de zonas rurales. Hubo enfrentamientos en los mercados urbanos, donde los comerciantes amenazaron, por ejemplo, con quemar al presidente de los 48 Cantones de Totonicapán. En esta situación la policía apoyó a los comerciantes e impidió manifestarse a los indígenas. A esta movilización también se sumó la Asociación de Estudiantes Universitarios Oliverio Castañeda de León (AEU).
Para evitar estas manfiestaciones, desde el ejecutivo se implementó el toque de queda y se puso en marcha en varias zonas urbanas carpas para vacunación del COVID-19 donde las personas se estaban movilizando. Para reafirmar y justificar esta decisión totalmente arbitraria sobre el derecho al reclamo, el presidente Giammattei indicó en su cuenta de Twitter: “Es tiempo de ser responsables y evitar esas situaciones que los expone al virus. Es muy probable que ustedes no sufran consecuencias graves si se contagian, pero sí es probable que contagien a personas cercanas y ellos sí sufran consecuencias fatales. ¡Cuídense! Háganlo por ellos”.
El hartazgo de la población fue la destitución del fiscal Sandoval, que tenía a cargo la Fiscalía Especial Contra la Impunidad (FECI). Desde allí se estaban develando varios hechos de corrupción del actual gobierno; la FECI mantuvo a flote investigaciones en contra de ex funcionarios de la más alta jerarquía gubernamental, y pudo desvelar a los participantes en la red que busca cooptar por enésima vez las cortes de justicia. Una hazaña en medio de un constante bloqueo que, según el mismo Sandoval, fue dirigido por Consuelo Porras y su círculo de confianza (1).
Autoridades indígenas y mujeres al frente del Paro Plurinacional
En Guatemala hay cuatro pueblos, el Garífuna, el pueblo Xinca, el pueblo Mestizo y el pueblo Maya, y dentro de este último hay 22 comunidades de pueblos indígenas. Desde el colectivo Minka Comunicación entrevistamos a una autoridad indígena, Alida Arana Vicente, abogada que actualmente representa al pueblo Maya Poqoman.
Foto: Rouger
Alida explicó: “Esta lucha colectiva es convocada por las autoridades indígenas para cuestionar el estado tal como está constituido. Las élites de este país han estado perpetrando durante muchos años acciones de corrupción, impunidad y debilitamiento del estado para no garantizar los servicios básicos y derechos fundamentales a la población y esto ha traído secuelas lamentables. A partir de la pandemia comienza un aumento de la pobreza en los pueblos, y el gobierno hizo préstamo de miles de millones que supuestamente iban a paliar a la población, pero eso no llegó a las comunidades”.
Desde 2018 se ha venido debilitando el acceso a la justicia y el debilitamiento de la institucionalidad para evitar la persecución penal de delitos vinculados a la corrupción o impunidad, donde estas elites han jugado un papel fundamental para cooptar el poder y los puestos claves para que todo se mantenga sin investigar, en esta línea se da el despido del fiscal Sandoval: “Él era como una piedra en el zapato, a partir de esto las autoridades indígenas convocan a un paro para exigir la renuncia del presidente por el mal manejo de la pandemia que ha desatado alrededor de 13.000 muertes por COVID-19”, indica Alina Vicente.
“Nosotrxs cuestionamos este estado y su modelo, porque este estado fue diseñado hace 200 años con una mirada racista, clasista y patriarcal, estamos en una crisis y queremos tener la posibilidad de soñar, de venir y poder iniciar un nuevo estado plurinacional, una mirada diversa, donde la mirada vaya más allá de la explotación de la madre tierra, del despojo de la riqueza de los pueblos y se pueda empezar a que los diferentes actores y los diferentes pueblos puedan ocupar el espacio que les corresponde como actores políticos, pero también de una nueva forma de convivir, un estado que respete la vida de los pueblos, un estado que no esté solamente para reprimir a los pueblos porque esto es lo que ha pasado, aquí en Guatemala hay una riqueza inmensa y existe el despojo, pero en servicios públicos el estado está ausente”, expresó la autoridad indígena dando a comprender que Guatemala al igual que varios países de Latinoamérica tiene una tremenda desigualdad económica, pero no es porque sea un “país pobre”, sino que es un país empobrecido por la clase política corrupta, ya que por ejemplo en 2019 el informe anual de Global Witness denunció que “Guatemala había quintuplicado los asesinatos a defensores de la tierra”.
Desde el 29 de julio el paro no ha parado, Alina Vicente denuncia que a través de cuentas falsas en redes sociales e internet se ha querido minimizar las protestas, también los medios hegemónicos no han cubierto todo lo que se viene manifestando en el pueblo de Guatemala, pero aclaró que sí han ayudado a difundir los medios alternativos y los jóvenes que están acompañando las movilizaciones con sus celulares a través de las redes sociales. Pide, sin embargo, que a nivel internacional se pueda difundir su lucha para que las autoridades se sientan interpelados con estos reclamos.
Para ver la entrevista completa a la autoridad indígena de Guatemala Alina Vicente visitá el canal Youtube