Un estremecedor giro sacude la investigación por la desaparición de la defensora ambiental Julia Chuñil Catricura. A casi 11 meses de su desaparición, la familia ha dado a conocer un audio en el que el empresario Juan Carlos Morstadt Anwandter reconoce que Julia “la quemaron”, según confirmó su hijo Pablo San Martín en un punto de prensa acompañado de abogadas y organizaciones de derechos humanos como Amnistía Internacional y el Comité de Ética Contra la Tortura.

El audio, obtenido a través de una interceptación telefónica autorizada, contradice la línea oficial de la Fiscalía, que hasta ahora ha enfocado la investigación en los propios hijos de la víctima y ha relegado al empresario Morstadt, dueño del predio donde Julia fue vista por última vez, como un sujeto de interés limitado.
“Si me pasa algo, ya saben quién fue”, advirtió Pablo San Martín, hijo y vocero de la familia, visibilizando la sensación de vulnerabilidad y la presión que enfrentan mientras buscan justicia. La familia denuncia que la fiscalía ha recurrido a estrategias de criminalización hacia ellos, incluyendo la utilización de testigos con identidad reservada para inculparlos, mientras se ignoran pruebas directas contra el empresario.
Las abogadas que representan a la familia, incluyendo a Karina Riquelme, sostienen que la filtración del audio representa una “prueba crucial” que la justicia chilena ha desatendido. La defensa sostiene que Morstadt tenía un conflicto previo y sostenido con Julia y su familia, y que la investigación en su contra no ha avanzado hacia una formalización, a pesar de su vinculación con el predio, armas no declaradas y movimientos financieros sospechosos.
Organizaciones internacionales enfatizan la responsabilidad del Estado chileno en la protección de defensores ambientales y la debida diligencia en casos de violencia contra mujeres y pueblos originarios. Rodrigo Bustos, de Amnistía Internacional, recordó que el incumplimiento de medidas cautelares de la CIDH agrava la responsabilidad estatal.
La familia de Julia convoca a una marcha nacional el próximo 8 de noviembre, con concentraciones simultáneas en varias ciudades, incluyendo Santiago, para exigir que se investigue al verdadero culpable y se garantice justicia. Pablo San Martín concluyó: “Nos están tratando de hacer un montaje. Nosotros queremos encontrar al verdadero culpable, no a personas inocentes”.
Julia Chuñil, defensora ambiental y orgullosa de sus raíces mapuches, permanece en la memoria como un símbolo de lucha y resistencia, mientras su familia enfrenta una doble batalla: la búsqueda de justicia y la defensa frente a la criminalización que acusan del sistema judicial chileno.
